Por: Arturo García Caudillo Sureste Magazine
Al grito de ¡traidores, traidores! y ¡El Poder Judicial no va a caer, no va a caer! Manifestantes que llevaban varios días apostados a las afueras del Senado de la República, irrumpieron primero en el patio del Federalismo, y después en el Salón de Plenos de la Cámara Alta, en busca de detener la sesión en la cual se discutía la Reforma al Poder Judicial.
La democracia pende de un hilo y los trabajadores del Poder Judicial lo sabían. Desde temprano las versiones sobre “chapulines” corrieron por los pasillos del inmueble de Reforma e Insurgentes, y a ello contribuyeron las acciones de las fiscalías en Campeche y Veracruz en contra de los senadores de Movimiento Ciudadano (MC), Daniel Barreda, y Miguel Ángel Yunes, tanto papá como hijo. Y no es que éstos últimos dos sean unas blancas palomitas, pero la 4T está operando como un auténtico cartel y los Yunes cayeron en sus garras.
Nadie de MC podía comunicarse con Barreda, el líder emecista, Clemente Castañeda Hoeflich informó que el papá de su compañero estaba ilegalmente detenido y casualmente sólo el coordinador de Morena, Adán Augusto López Hernández, logró hablar con él por teléfono, incluso en dos ocasiones, porque fue desde su móvil, desde donde el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, consiguió hacerlo. La suerte estaba echada.
Y lo mismo ocurrió con el panista Miguel Ángel Yúnez Márquez, que solicitó permiso para dejar su curul en manos de su padre, personaje polémico desde hace muchos años, por su mandato como gobernador de Veracruz, como amigo del pederasta Succar Kuri y por su gestión al frente del ISSSTE, entre otras cosas. Al final sólo rindió protesta para defender a su primogénito, que al reanudarse la sesión en la vieja casona de Xicoténcatl, tras un par de horas de receso por la toma del Pleno en el edificio principal, retomó sus funciones.
La división de poderes pende de un hilo, el Ejecutivo y el Legislativo se lanzaron contra el Judicial y con ello la endeble democracia mexicana quedó en riesgo. Habrá triunfado el Cártel de la 4T y la gestión de Alito Moreno y Markitos Cortés habrá rendido frutos. Quedó claro que 35 millones de votos pesan más en un padrón de cien millones y en un país con 130 millones de habitantes.