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Se prevé que la Dirección de Inteligencia, se revele contra el ministro pues ya elaboraron un informe donde se deslindan por la fuga del narcotraficante que vivía plácidamente en Bolivia

Alicia Zenil

Derivado de la última publicación de Sureste Magazine y la revelación de los nombres de los oficiales y agentes involucrados que permitieron el escape del narcotraficante Sebastián Marset, se inició una lucha interna entre el ministro de Gobierno y la Dirección de Inteligencia de Bolivia.

La situación para deslindar responsabilidades por la fuga del narcotraficante ha provocado que el ministro de Gobierno no confié en la cúpula de inteligencia, por lo que ha dejado de dar órdenes directas y llamar a reuniones a los responsables, y en privado ha creado a un nuevo grupo. “Un grupo de inteligencia paralela”.

Por otro parte el jefe nacional del CEIP, Teniente Coronel H.P alias «Camilo», ha preparado un informe con cada uno de los miembros que participó en el seguimiento a Marset con el fin de deslindarse.

En dicho informe se detalla todo el trabajo de vigilancia, todos los pasos de Marset que eran notificados al ministro de Gobierno, revelaron las fuentes de inteligencia a Sureste Magazine. Es decir que si no se dio la indicación para detener a Marset como revelamos en la anterior publicación “sería por que el ministro no la dio”.

En dicho informe mencionan que el ministro tenía conocimiento a detalle del seguimiento y vigilancia a Marset. “Del paso a paso, y todos los detalles”

El informe fue realizado con la información de cada uno de los miembros de inteligencia que han sido parte del caso y que fueron convocados por el teniente coronel H.P. jefe nacional del CEIP, el director de inteligencia E.P. y de un Coronel de apellido Correa.

Para Inteligencia y el grupo de H.P., es el ministro es quien estaba vinculado a través de un operador con el uruguayo Marset.

Por su parte el ministro con su grupo de inteligencia paralelo, y a raíz de que ya no confía en la cúpula de Inteligencia quiere descabezar y hacer una limpia empezando por el cambio y destitución de los involucrados, Tenientes coroneles, Coroneles y otros oficiales.

Por estos motivos es que se mantiene una lucha interna entre el ministro de Gobierno y la Policía. Aunado a que inteligencia tampoco comparte toda la información con el ministro. Ya no le reportan todo de las investigaciones que realizan.  

Esa lucha ya tiene antecedentes de pungas internas entre el Gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) y la policía boliviana, que terminó en el golpe de estado en el 2019 con el amotinamiento de la policía.

En la publicación pasada se habló de Tucho como pieza clave, un subteniente de apellido Lizarazu, quien también colaboró en dicho informe que no solo buscan entregarlo o presentárselo al comandante General de la Policía si no al propio presidente de Bolivia, Luis Alberto Arce Catacora.

También tenemos conocimiento que inteligencia le hace seguimiento a Tucho, de quien se reportó que acudió ante la embajada de EE.UU en La Paz.   

Esta pugna interna está provocando inestabilidad en la seguridad nacional y la lucha contra el narcotráfico en Bolivia.

Información que llegó a este medio de comunicación revela la lista de los oficiales que participaron en el caso Marset. Son 17 personas, que además están por entrar al Centro de Entrenamiento Internacional Antinarcóticos “Garras” (que por cierto fue instaurado cuando la DEA trabajaba y operaba de manera oficial en Bolivia). Lo delicado de esto, es que estos oficiales se capacitaran en el lugar donde se entrena para luchar contra el narcotráfico.

La relevancia es que, sí no se sabe ahora quienes son los verdaderamente coludidos con el narcotraficante Marset y estos miembros del CEIP al entrar a la FELCN obtendrán información, fuentes, contactos y operaciones activas de la lucha contra el narcotráfico que lleva Bolivia. Sería algo sumamente delicado señalan las fuentes de información pues si los miembros del CEIP han sido corrompidos harán lo mismo dentro de la FELCN, por lo que no deberían participar, pues pondrían en riesgo el sistema de lucha contra el crimen organizado.

Este descontento y desconfianza que ha generado el Caso Marset entre el ministro de gobierno y la Inteligencia de la policía, también ha ocasionado que miembros de Inteligencia liberen información reservada y la pasen o envíen a detractores del ministro.

De acuerdo con una de las fuentes de las que Sureste Magazine ha dado seguimiento del Caso Marset en Bolivia, durante la gestión del expresidente, “Evo Morales se trabajó bien con la Policía, mientras él la respetó, pero su ruptura se dio cuando Evo Morales le quitó su lugar institucional y se la dio al Ejército y la policía salió de Palacio… desde ese día, la policía empezó a conspirar y en 2019 logró su venganza… Porque al presidente Evo no lo tumba Camacho… Lo tumba la Policía”, recordó.

“El Motín policial Lo cambio todo… porque el comité pro Santa Cruz ya iba a levantar el paro, y justo les cayó el motín policial. El error del ministro es haber creado una estructura de inteligencia paralela… pequeña… operativa… pero con eso la policía empezó a desconfiar… y empezó a trabajar para sí misma.”

Nuestra fuente finaliza, asegurando que para el ministro de Gobierno le será difícil reestructurar, mientras, tenga la idea de que puede contar con un cuerpo de inteligencia personal, con fines políticos… cómo se tiene hoy.

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