Ondas del Mundo estas historias son el producto de mi experiencia por el mundo en el que he vivido. Hoy hablare sobre el proyecto: La ciudad de 15 minutos, ¿este es nuestro futuro?
Por Naran Sodnomyn
Todos nosotros nacimos sin poder decidir nuestro destino, como una ruleta rusa, donde se para la flecha ahí nos toca: el país, la raza, la religión o un régimen social. Así me pasó, nací en un hogar bajo un régimen socialista y crecí con padres amorosos; con estatus de intelectuales y hermanos estudiosos, en una típica familia de aquellos años.
Durante mi niñez y juventud viví bajo los apapachos de mis padres y hermanos mayores, sin preocupación, sin cuestionar los temas que enfrenta un adulto. Crees que así es la vida y así debe de funcionar. Con el tiempo vas creciendo, vas estudiando, y a través de lecturas y vivencias descubrirás que el mundo es muy grande. Yo tuve la oportunidad de salir muy joven de mi país.
Transcurrió medio siglo en este mundo desde que estoy viva, conocí muchos países y culturas. Presencié la caída de un sistema social, la transición a otro régimen, donde varios países declararon sus independencias. Estuve a 250 km de distancia de la explosión de una central nuclear, presencié la revolución tecnológica más importante del siglo pasado. Viví el levantamiento de los pueblos indígenas conocido como una rebelión, sobreviví una pandemia, y ahora me toca una guerra entre dos pueblos ‘hermanos’.
Gracias a la comunicación satelital casi se eliminaron las distancias que antes había en el mundo. La conectividad entre los pueblos a través de medios alternativos, como redes sociales, acelera nuestro acceso al conocimiento; no como antes, que teníamos los ojos vendados y escuchábamos nada más la propaganda del gobierno.
¿Por qué hablo sobre todo esto? Actualmente en las <<benditas>> redes sociales hay una polémica sobre el concepto << la ciudad de 15 minutos>>, creado por el científico Carlos Moreno, profesor y urbanista de la Universidad de Sorbona, Francia. Después de varios meses que fue publicado su trabajo hasta lo implementaron en Francia, y ya hace el ruido en Latinoamérica.
En la Cumbre Mundial de Alcaldes, la cual se llevó a cabo en diciembre del 2022, en la ciudad Buenos Aíres, Argentina, participaron alcaldes de 121 ciudades de todo el mundo. Ahí, el científico Carlos Moreno comentó que el proyecto nació en base a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, de la Organización de las Naciones Unidas, el cual fue aprobado y estudiado por tecnócratas de alrededor del mundo. Me llamó la atención su concepto de tiempo ¿por qué la ciudad de 15 minutos? Él explica que su propuesta consiste en lo siguiente: que vivamos, trabajemos, compremos, atendamos nuestra salud, cultivemos nuestras almas y mentes, así como el esparcimiento, alrededor de nuestras casas, en un perímetro de 15 minutos.
Eso significa que un tecnócrata vende su visión a más de un centenar de personas que ostentan la toma de decisiones a primer nivel, en varios países del mundo, los alcaldes. Esta visión se transforma como objetivo del desarrollo sostenible, después de consultas y acuerdos, los Estados miembros de la ONU la adoptaron, oficialmente, como parte de una nueva agenda global mediante la Declaración “Transformar nuestro mundo”, en la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Entonces, de estos hechos, nacen muchas preguntas: ¿realmente el modelo es posible? y ¿funcionará para todo el mundo? Ya que en cada nación somos distintos en muchas cosas, por ejemplo, el Banco Mundial clasifica las economías del mundo en cuatro grupos de ingreso: alto, mediano alto, mediano bajo y bajo. Esta clasificación se basa en el ingreso nacional bruto (INB) per cápita (en USD corrientes). Por otro lado, acabamos de tener una experiencia terrible por la pandemia del SARS-CoV-2 (COVID 19) y observamos lo que pasaba en un país donde la élite gobernante tenía control total sobre los ciudadanos y a través de la internet y la inteligencia artificial, control de facto y remoto. No dejaban salir a los ciudadanos de sus edificios, la gente encerrada tenía hambre, sin suficiente agua, con sus familiares enfermos, etcétera.
Imaginemos como será la ‘Ciudad de 15 minutos’, probablemente, tendrá un acceso controlado y restringido, no pasará cualquier persona, si quieres invitar a alguien tienes que pedir permiso, en consecuencia, cumplir ciertos lineamientos como solicitar con antelación, especificar parentesco o qué relación tiene con la persona, la duración de la visita, capaz hasta te cobran. Ya no tendrá uno privacidad, en nuestras vidas llenas de cámaras de vigilancia. Nace otra pregunta ¿no será el objetivo encerrar y tener el control de nuestras vidas como en la pandemia? ¿qué pasaba? Capturaban a los escépticos del coronavirus, antivacunas, movimientos anti-mascarillas, entre otros disidentes. A nadie le gusta que lo encierren y perder la libertad sobre nuestras decisiones. Nosotros tenemos una sensibilidad muy fuerte contra los encierros.
Así que, básicamente, como pinta el panorama, en el futuro nunca tendremos posibilidad de tomar decisiones por nosotros mismos, supuestamente estamos civilizados y vivimos en la era de una sociedad democrática y con alta conciencia. Acordémonos, antes la humidad en el nombre de Dios cometía muchas atrocidades, ahora, en el nombre de comunidades sostenibles, unos tecnócratas decidirán por nuestras generaciones futuras cómo deben de vivir y en qué situación. Entonces, pasan los siglos y ciclos y la humanidad no cambia y no evoluciona la manera de organizarse. Un grupo de privilegiados seguirá guiando nuestros rumbos. A lo mejor cuando la humanidad tome las decisiones, realmente, pensando en la gente por una vida de igualdad y dignidad, entonces acabarán las guerras, las hambrunas y la pobreza.