*Recibe bastón de mando de manos de López Obrador
Por: Arturo García Caudillo
En el mismo lugar donde hace tres meses acordó realizar un proceso parecido a una consulta para determinar a su sucesor, el presidente Andrés Manuel López Obrador entregó el bastón de mando de la llamada Cuarta Transformación a la ex Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien apenas un día antes fue anunciada como ganadora de la encuesta que la elevó a coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T.
Hasta el restaurante El Mayor, en el Centro Histórico de la capital, llegaron los gobernadores de Morena y sus aliados, para darle seriedad y aval al evento.
Ahí, a las puertas del inmueble, el titular del Ejecutivo Federal levantó el madero con una cabeza en forma de águila y listones de colores, y sin decir palabra, se lo entregó en la mano a Sheinbaum Pardo.
Este acto simbólico marca el inicio de una nueva era, en la que López Obrador deja de ser líder de la 4T y encamina a Sheinbaum hacia la competencia oficial por la Presidencia de la República.
Tras recibir el báculo, Sheinbaum se dirigió a los simpatizantes del movimiento, quienes en gran cantidad se apostaron a las afueras del restaurante.
“Y la verdadera justicia se hace realidad cuando se apoya a las y los de abajo; y que un país no puede prosperar cuando se apoya al más próspero, y que la prosperidad sólo tiene sentido cuando es compartida. O dicho de otro modo, por el bien de todos, primero los pobres”, expresó la ahora nueva líder de la 4T.
“¡Eres un chingón, López Obrador!”, se escuchó la voz de u a mujer entre el público.
En respuesta la gente comenzó a corear su tradicional grito de guerra, no dejando que Sheinbaum continuara su discurso: “¡Es un honor estar con Obrador, es un honor estar con Obrador, es un honor estar con Obrador!”.
De hecho, fue el propio López Obrador quien, con la mano, les pidió que dejaran hablar a Sheinbaum. Y así ella pudo continuar. Y lo hizo atacando a la oposición y a sus intentos por arrebatarles el poder.
“Por supuesto siguen presentes los que quieren regresar al pasado, ahora con máscara de cambio, como la mentira de Fox, que prometió un cambio y terminó con un fraude. Ellos, los del pasado, nunca cumplieron sus promesas y nunca las podrán cumplir porque son la imagen viva de la corrupción”, y así continuó su ataque a los neoliberales, acusándolos de falsos feministas, falsos demócratas y de falsos ciudadanos.