Empresas, instituciones y organizaciones en general se conjuntaron para brindar apoyo a un grupo de migrantes que se encuentran en las afueras de Plaza Las Américas, en el norte-oriente de Tuxtla Gutiérrez.
Bomberos, estudiantes de medicina, integrantes de organizaciones religiosas y voluntarios en general se coordinaron para apoyar a las cientos de mujeres, niños y hombres que pasan horas en espera de una oportunidad para continuar su camino hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
Aquí los grupos de ayuda llegan a diario, a entregarles alimentos, algunos insumos como toallas húmedas, pañales, toallitas sanitarias y, algunas veces, ropa, por lo que este día no fue la excepción.
Los bomberos recibieron algunos insumos con cloro y jabón, por lo que con ello se dedicaron a limpiar el espacio en donde hay un pequeño techado que les permite a las personas de otros países pasar el día bajo algo de sombra y en algunos momentos refugiarse de la lluvia, además de pernoctar.
Tras la limpieza se colocaron grupos de estudiantes de medicina quienes atendieron —uno a uno— a los migrantes, y al mismo tiempo algunos de ellos se dieron la oportunidad de escuchar un mensaje compartido por los grupos de cristianos que llegaron por igual a apoyar. Momentos después se les entregó tortas y algunas bebidas.
La mayoría son originarios de Venezuela, pues aseguran que las condiciones económicas en su país son deplorables.
Familias enteras esperan que se les dé la oportunidad de continuar su camino, algunos aseguran que han llegado aquí desde Tapachula, otros más fueron redirigiros de Ciudad de México a Villahermosa y de ahí buscan retomar la ruta para de nueva cuenta tomar el camino al centro del país y llegar a la ciudad de Piedras Negras, en el estado de Coahuila, y así tener la oportunidad de conquistar el “sueño americano”.
Algunos de ellos reconocen que buscan un empleo temporal para lograr obtener recursos, pero no es nada fácil encontrarlo.
Confiesan que su estancia en México tiene dos aristas, pues el trato de las autoridades de Migración no siempre es cortés, aunque el apoyo de la sociedad mexicana en general es evidente, pues a diario se acercan a ellos personas que les entregan algún tipo de apoyo.
